Sin los eneros donde bostezas
no hay hálito de vida
que resurja de entre las hojas muertas.
no hay hálito de vida
que resurja de entre las hojas muertas.
Sin las hojas que acurrucas a tu paso
no puedo caminar descalza
sin dañar el recuerdo de aquella mirada perdida.
no puedo caminar descalza
sin dañar el recuerdo de aquella mirada perdida.
Sin enero no hay miradas
ni recuerdos
ni hojas muertas.
ni recuerdos
ni hojas muertas.
Sin los eneros donde te posas
no hay cabida para los besos
que sacian la sed de un encuentro.
no hay cabida para los besos
que sacian la sed de un encuentro.
Sin encuentros no hay despedidas
y, sin ellas,
hay eneros.
y, sin ellas,
hay eneros.
Sin eneros tú no existes y,
sin ti,
yo me abandono en febrero.
sin ti,
yo me abandono en febrero.